¡Tu carrito está actualmente vacío!
Tengo miedo y, spoiler, es normal
A veces sentimos que tener miedo significa que algo no está bien. Que no estamos listas para dar ese paso, que sería mejor no hacer ningún cambio, lo que implicaría no avanzar…
Pero, ¿sabes qué? Yo siento miedo constantemente. He tenido miedo en cada paso importante de mi vida, pero también en pasos pequeños, incluso en ocasiones que no eran ni «pasos», solo era seguir: Exponer en clase (me daba pánico), entrar sola a un sitio nuevo (o no tan nuevo), una charla incomoda, cerrar puertas, abrir nuevas, cortar relaciones, empezar otras, viajar sola, viajar con alguien, emprender, escribir, mostrarme tal y como soy y un largo, larguísimo, etcétera.
Y, precisamente por eso, sé que soy una persona muy valiente, llena de coraje, porque a pesar de tener miedo a todo, lo hago, con miedo, pero lo hago (bueno, no siempre, claro). Porque hay que ser muy valiente para dar pasos, hacer cambios, para enfrentarse a esa incomodidad y tomar acción.
Sentir miedo no es un problema, es parte del camino
Nos enseñaron a ver el miedo como una señal de debilidad, como algo que hay que eliminar antes de dar un paso. Pero, ¿y si no fuera así? El miedo no es un enemigo, sino una emoción natural que aparece justo cuando estamos por cruzar una frontera importante.
¿Por qué sentimos miedo cuando vamos a cambiar?
Sentimos miedo cuando salimos de lo conocido, cuando nos atrevemos a hacer algo que nunca hicimos, cuando tomamos decisiones que nos sacan de lo cómodo o de lo que otros esperan.
⠀
Es una emoción que busca protegernos del peligro, pero en la vida moderna, ese “peligro” no siempre es real. A veces solo es una charla importante, una decisión que implica cambio, un primer paso hacia algo que deseamos, o algo de lo que queremos salir.
En esos casos, el miedo aparece no porque algo esté mal, sino porque algo nos importa. Porque estamos tocando una parte vulnerable de nosotras. Porque hay algo que se está moviendo por dentro.
El problema no es sentir miedo, es quedarse atrapada en él
Todas las personas sentimos miedo. La diferencia está en lo que hacemos ante él.
⠀
Si dejamos que el miedo tome el control, dejamos de vivir. Empezamos a evitar, a aplazar, a encoger nuestros sueños para que no nos incomoden. Y ahí es cuando el miedo deja de ser una emoción pasajera y se convierte en un obstáculo.
Pero también podemos hacer otra cosa: escuchar al miedo, entender qué nos quiere decir, abrazarlo y avanzar con él de la mano.
Porque no necesitas tener cero miedos para actuar. Necesitas coraje para seguir, a pesar de él.
¿Qué te está mostrando tu miedo?
Detrás del miedo, muchas veces, hay algo importante. Algo que te toca. Puede ser un deseo que aún no te atreves a decir en voz alta, un paso que sabes que te haría bien, o incluso un “ya no más” que necesitas poner aunque duela.
⠀
Si hoy estás sintiendo miedo, puedes preguntarte:
¿Qué parte de mí se siente amenazada?
¿Hay algo en esto que realmente deseo, pero me da vértigo?
¿Qué podría cambiar si cruzo este umbral?
¿Qué temo perder?
⠀
A veces, solo al mirar el miedo de frente, entendemos su verdadera forma. Y descubrimos que no era un monstruo… sino una puerta.
Aprender a caminar con miedo
No se trata de eliminar el miedo. Eso sería intentar eliminar una parte natural de nosotras. Se trata de tener herramientas para sostenerlo, acompañarte con compasión, y moverte paso a paso. Aunque tiemble la voz. Aunque no tengas todas las certezas.
- Puedes sentir miedo y seguir adelante
- Puedes sentir miedo y tomar decisiones importantes
- Puedes sentir miedo y elegir confiar, aunque sea un poquito
En resumen: Está bien tener miedo
Sentir miedo no es un signo de debilidad, es un signo de que te estás moviendo. De que estás viva. De que estás creciendo.
⠀
Así que la próxima vez que aparezca, no lo rechaces. Escúchalo. Abrázalo. Y pregúntate:
¿Qué me está queriendo decir este miedo?
¿Y qué pequeño paso puedo dar hoy, incluso con él presente?
Porque a veces, lo que más miedo da puede ser justo lo que más necesitas.

Deja una respuesta